El Grupo Wagner está liberando a rebeldes de las cárceles en República Centroafricana y enviándolos a la guerra de Ucrania, según denuncia el Daily Beast, acusación que se suma a la de realizar exactamente lo mismo con presos de cárceles rusas detenidos por delitos graves.

Decenas de hombres detenidos por el ejército y la policía del país africano por delitos como violación y asesinato han sido reclutados por el ala local de militantes de Wagner, comúnmente conocidos como «rusos negros».
«Ellos (Wagner) dijeron que necesitaban mano de obra urgente en Malí y Ucrania», afirmó un oficial del ejército de la República Centroafricana al diario.
El Grupo Wagner opera en la República Centroafricana desde hace años. En 2018, los periodistas rusos Orkhan Dzhemal, Alexander Rastorguev y Kirill Radchenko fueron asesinados en el país después de investigar sus actividades.
Según las investigaciones de dos medios de comunicación independientes rusos, Dozhd y Dossier, los mercenarios rusos pueden estar vinculados al asesinato. El Grupo Wagner también ha sido acusado de abusos contra los derechos humanos, incluyendo tortura y ejecuciones extrajudiciales, en Ucrania, Siria, Libia, la propia República Centroafricana, Sudán y Mozambique.

Yevgeni Prigozhin, fundador de los Wagner y conocido como «el chef de Putin», fue quien estuvo detrás del nombramiento del general Serguéi Surovikin para dirigir la invasión a Ucrania y continúa colaborando con él de manera estrecha. Bajo su dirección la organización paramilitar pasó de 250 integrantes en 2014 a 40.000 en este último mes de noviembre.